La fortaleza de Bryt
La fortaleza de Bryt es un pequeño baluarte escondido en el bosque del ahogado, al norte de Bajo Kaiser, hace cientos de luxantes, antes de la batalla de los ahogados, el baluarte era un sitio estratégico en la guerra contra Senífini, sirviendo como primera defensa de las zonas altas ante los intentos de los salvajes por recuperar parte del terreno fronterizo del noroeste de la región conocida como El Espejo
Arquitectura
La fortaleza es una construcción cuadrada de piedra de tres pisos de altura con sus puertas mirando hacia el este, su entrada principal está ubicada en el segundo piso, únicamente alcanzable a través de unas escaleras de una única rampa construidas con largas lascas de piedra apiladas una sobre la otra colocadas de manera estratégica para que, en caso de que las murallas fuesen penetradas, el ejército enemigo quedara al alcance de las flechas de los arqueros ubicados en las barbacanas del tercer piso y de la única torre de homenaje con la que cuenta el baluarte.
La torre sobresale dos pisos por encima de la fortaleza y está construida en la esquina sureste otorgándole un excelente ángulo para proteger el brazo de Bryt, la puerta principal de la muralla y las escaleras que dan paso al interior de la fortaleza. El alto de la torre cuenta con largas almenas en forma de 'V' que en las épocas más bélicas de la fortaleza servían para darle cobertura al cuerpo de arqueros y vigilantes, en la actualidad protegen un grupo de casetas con fines de cetrería, siendo poseedores de un ejemplar de Kaiser azul adulto.
Defensas
Construido desde los inicios de la Guerra de la Unión, el baluarte fue equipado con una balista única traída desde Zarquitania, bautizada como el brazo de Bryt, de la cual la fortaleza recibe su nombre, y se mantiene aún en funcionamiento. Instalada a ras de piso en la muralla este de la fortaleza aprovechando los enormes proyectiles de más de 10’ de longitud para destrozar a sus enemigos.
La ubicación geográfica de la Fortaleza de Bryt es una de sus más grandes ventajas estratégicas, la fortaleza está incrustada en lo profundo del bosque del ahogado, una taiga montañoso de clima gélido, espesa vegetación y una fauna activa, al norte, la fortaleza limita con el muro de lágrimas y al sureste, a tan solo unas cuantas horas a pie se encuentra Lago espectral , visible desde la torre en un día despejado, dos defensas naturales que complican en gran medida un intento de asedio.
Muro de lágrimas: Una ladera rocosa natural repleta de árboles de coníferas y un rico musgo que retiene grandes cantidades de agua del desnieve que hace fluir innumerables hilos de agua helada por toda la pared de piedra, creando una muralla natural supremamente resbaladiza, el agua que no es absorbida por la vegetación se filtra hacia un conjunto de ríos subterráneos, en trimón, el desnieve aumenta y la verde ladera se convierte en una pequeña cascada con una caída suave, de ahí su nombre. En las épocas más frías el agua se convierte en hielo creando formas irregulares que hacen imposible escalar la ladera.
Historia
En los inicios y en su apogeo militar, el baluarte era administrado por el ejército de la unión sin darle preferencia a ninguna de las casas de Montino, sin embargo, luego del incidente ocurrido en La batalla de los ahogados, el entonces Kaiser de Rikcelare, considerando esta masacre una ofensa directa a la autoridad de la organización y contando con el beneplácito de los otros cinco líderes, decidió, en conjunto con su ejército personal, desmantelar la Casa de la Cigüeña, responsable de haber perseguido injustificadamente a un gran destacamento de La Casa del Zaino.
Ésta última, poseedora de una fuerza de caballería con una influencia lo bastante grande como para considerar el ataque un desafío directo al relativamente nuevo orden implementado en el continente.
Gran parte de los miembros fueron segregados hacia casas con mucha menor importancia, una porción de sus tierras fueron adjuntadas a la Casa del Zaino como compensación por los daños causados al enemigo, y como una estrategia política para convencer a aquellas casas que aún se resistían a aceptar al Clan de los Kaiser como autoridad absoluta de Montino, otra gran porción de sus riquezas quedaron en manos del ejército de la unión, que se vio reforzado con la llegada de nuevas unidades de caballería, armamento y recursos extraídos de las minas controladas por la Casa de la Cigüeña, la cual quedó reducida a un pequeño grupo de miembros que con el paso de los luxantes y el decaimiento de la guerra en la zona norte de Bajo Kaiser fueron lentamente perdiendo participación en el frente de batalla y exiliados a administrar el baluarte, con ahora casi nulo impacto en el enfrentamiento entre ambos continentes. Aquellos que decidieron resistirse fueron masacrados en nombre de la nueva justicia.
Al pasar los luxantes, y luego de décadas de confrontaciones en la zona, el conflicto entre los dos continentes se fue trasladando cada vez más hacia el sur, formando lo que se denomina comúnmente como La línea, restando importancia militar a la zona inferior de Bajo Kaiser y relegando a la fortaleza a labores de vigilancia sobre los rutas comerciales entre las ciudades de Vadal, Hálerey y Hofsfell.
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