Olanthius, como caballero de la muerte, conserva algo de la nobleza que lo caracterizaba en vida, pero ahora su apariencia refleja la maldición que lo ha consumido. Viste una armadura oscura, oxidada por el paso del tiempo, y su rostro es una sombra de lo que fue, con la piel estirada sobre los huesos y una expresión que revela tristeza y dolor. Siempre va armado con una espada larga encantada, que fue un símbolo de su honor pero ahora sirve para castigar a sus enemigos en Avernus .