El ancla
El ancla es una de las armas exclusivas que tiene Zarquitania para usar en su defensa, están distribuídas a lo largo de su muralla, contando con diez de estas gigantes armas. El objetivo del arma es reducir la moral del enemigo cuando la vean en funcionamiento.
Descripción
El ancla tiene la altura de cuatro hombres y el ancho de uno y medio, es muy parecida a un ancla real, de ganchos, pero a lo largo de todo su cuerpo discurren ganchos intercalados y cada vez más delgados a medida que se acercan al ojo de arganeo, extremo que normalmente va amarrado a la cadena. Sus ganchos, además, están muy afilados y cada punta tiene pequeñas contrasalientes a modo de anzuelo, para evitar que algo engarzado, se pueda liberar fácilmente.
Funcionamiento
Cada ancla va encarrilada en un ángulo de 45 grados en un gigantesco disparador hecho de roca, y sujeto a la muralla como si fuese parte de ella, este riel de roca tiene una gran cuerda hecha de tendones de elefantes lanudo que se estira gracias a la acción de 10 hombres que dan vueltas a pesadas manivelas.
Una vez está armada, a una orden, se tira de un pasador de madera que libera la tensión en la cuerda, haciendo que el ancla salga disparada a distancias de hasta 500 pies, su vuelo el lento debido a su inclinación, pero su objetivo no es matar a nadie en el impacto.
Cuando el ancla ha caído en el campo de batalla, se libera otro pasador, el cual recupera velozmente el ancla gracias a otras cuerdas tensionadas previamente y ubicadas al interior de la muralla. A medida que el ancla es recuperada, arrasa en el campo de batalla con todo lo que se le atraviese, destruyendo carruajes, y clavando en sus ganchos a soldados y caballos por igual, cuando el arma está sobre el muro externo de la muralla, disminuye la velocidad con que es halada, entonces son hombres los que activan manualmente manivelas para terminar de subir por la pared el arma.
Su rearme es muy lento debido a que luego de cada uso, deben ser extraídos de los ganchos los cuerpos y partes de cuerpos de caballos y soldados que han sido perforadas, para quitarle exceso de peso y que pueda ser disparada a una distancia adecuada nuevamente.
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