Roble de Coedha

Los robles de Coedha, antiguos y escasos, forman parte del imaginario popular de Kalh, sobre todo de los lugares rurales y aquellas poblaciones que siguen las antiguas tradiciones. La creencia popular dota a los robles de Coedha de una consciencia primitiva, y los asocia como protectores de los bosques donde se encuentran. Otros aventuran que estarían vinculados a los Pasajes Fae, y hay quienes dicen que permiten viajar grandes distancias entre uno y otro, ya que estarían conectados entre sí de formas místicas.  
Pero más allá de las supersticiones populares, los robles de Coedha juegan sin duda un importante papel cultural. Las arboledas druídicas suelen agruparse en torno a uno de aquellos viejos robles, y se les considera sagrado. Por contraparte, su valorada madera los ha llevado casi a desaparecer. 
Hoy por hoy, sólo quedan un centenar de robles de Coedha desperdigados por Kalh, destacando en medio de los bosques o en las alturas. Son árboles antiguos, que han visto generaciones y generaciones, probablemente todos ellos anteriores al Caos de Ajhen, y que poco a poco caen en el olvido.

Resumen

La leyenda más difundida sitúa a los robles de Coedha como el espíritu guardián de los bosques, más una entidad consciente que un árbol. La mitología los situa siempre al centro del bosque, con su altura imponante vigilando todo a su alrededor y protegiendo la vida bajo su manto. Antaño, cuenta el mito, todos los bosques de Kalh eran uno sólo, unidos bajo la sombra protectora de los robles de Coedha, y hoy los robles aún recuerdan esas edades perdidas. 
Quienes veneran a las deidades silvanas, veneran la existencia de los robles de Coedha como el espíritu primigenio del bosque, una única consciencia unida por líneas místicas que atraviesan Kalh y los conecta.

Alcance

La mitología en torno a los robles de Coedha está largamente extendida, aunque toma un carácter casi reverencial en los pagos rurales y en comunidades que aún veneran a los dioses antiguos.