El roto para los descosidos

Disbandment

El Culto de Sylvanus hace su aparición tras lo sucedido con el Dragón de Vides y reclama a Fandork, quien anuncia su separación de la compañía con una Tormenta de Venganza.   Tras varias despedidas abruptas el Canis Nigra se ve mermado en números y las dos partes del mismo vuelven a juntarse.

La abrupta salida del clérigo de Sylvanus de la Compañía afecta a la moral de los restantes miembros de ambas mitades del Canis. Algunos de sus miembros, tanto del Canis Majoris como del Minoris deciden que es momento de tomar sus propios caminos.    Es así como Ryn, Ricardo y Prahktarr deciden llevar el cuerpo en coma de Necrix al lugar de su Círculo de Druidas. Tras una breve despedida parten en busca de dicho lugar recóndito.   Por otro lado, Rigel se encuentra a su vuelta a Waterdeep con su casa patas arriba, destrozada al parecer por entidades con esencia del Avernus. Al no encontrar rastro de sus padres ni su hermano, decide emprender su propia búsqueda, al márgen de los asuntos del Canis. La paladina se despide y deja como rastro solo un juguete que se encontró en la escena del crímen, el cuál le había regalado a su hermano Morty.   El resto de la Compañia decide reunirse en Candlekeep para tomar una decisión sobre el futuro del grupo.