Cordillera del Cielo

Los Dioses bendigan a la Cordillera. Si no fuese por ellas, el punto más alto del mundo sería ese horrible volcán. Pero bueno, no le dicen Cordillera "del Cielo" por nada, ¡HAHAHA! Rockhill tiene un lugar privilegiado dentro del mundo. Somos los únicos con los recursos y conocimientos para explorar las cimas de la Cordillera. Es verdad que ninguna expedición se ha acercado a la cumbre todavía, pero cada vez estamos más próximos. Y lo que hemos encontrado en el camino... uf. Ruinas antiguas inscritas con el lenguaje de los dragones, indicios de tribus de goliaths e incluso artilugios de épocas antiguas, ¡de nuestros ancestros! Esos viejos enanos en verdad llegaron a los rincones más reconditos del mundo. ¡Maestros de Cantera! ¡No podemos ser menos! ¡Armen sus equipos y preparen sus picas! ¡Cada día llegamos más cerca de la cumbre! (Kromdrus Firsthorn, Maestro del Oro y Señor de la Montaña de Rockhill)

La Cordillera Más Grande de Lov

Superando en altura a las Montañas de Ar Fan y de Dinok, a las Montañas Nevadas e incluso al mítico Volcán Nix'Kruzaek, la Cordillera del Cielo se considera la cadena montañosa más imponente del plano terrenal. Con cimas que superan con creces las alturas de las nubes, son conocidas por la constante nieve que cae a sus pies, la cual va dando paso al hielo a medida que aumenta la altura. Un ambiente inhóspito para los mortales, pocos son aquellos que hacen de la Cordillera su hogar. Exceptuando al poblado minero de Rockhill, por parte de la Alianza de Plata, y el aislado poblado de minotauros Mino'ke a orillas del Mar Espejo, los únicos humanoides que actualmente residen en las montañas son las tribus nómadas de goliaths, de las cuales cada vez quedan menos, al punto de que incluso en las incursiones hacia la cima de la montaña muy rara vez se pueden visualizar.
Su casi nula habitabilidad se debe de manera importante a las bajas temperaturas en su superficie, sobre todo al ir subiendo. Con fuertes nevadas y lluvias de escarcha a lo largo de su extensión, los aventureros que no suben preparados se ven rápidamente sobrepasados por el frío, muchos de ellos perdiendo la vida antes de siquiera alcanzar la mitad de la Cordillera. Además, la escasez de agua, alimento y recursos como madera para subsistir hacen casi posible la supervivencia dentro de la cadena montañosa. Sin embargo, esto no ha parado a las decenas de aventureros que constatemente intentan avanzar hacia la cima, esperanzados por los misterios y tesoros encontrados en el camino al tope. Sin embargo, incluso aquí algunas criaturas han logrado prosperar. Elementales de tierra y hielo, nidos de rocs y solitarios gigantes de la tormenta forman parte de la reducida población de las montañas.

Los Misterios Ocultos entre las Montañas

Fueron los famosos enanos mineros de Rockhill, los Maestros de Cantera, quienes impulsaron la idea de explorar la totalidad de la Cordillera de Cielo. Ya habían logrado increibles resultados minando hacia abajo, con proliferantes menas de recursos terrestres que impulsarían fuertemente la economía de la Alianza. El descubrimiento de la Subtierra sólo demostró que, a pesar de los peligros, toda esta cadena montañosa ocultaba secretos desconocidos para ellos. Impulsados por la ambición lideraron diversas excursiones hacia la cima. Las primeras fueron un fracaso: subestimando lo inhóspito de la Cordillera resultó fatal incluso para criaturas como los enanos. Pero a medida que fueron progresando, aprendiendo con cada incursión, descubrieron que sus sueños de tesoros podrían no estar tan alejados de la realidad.
Ocultas entre las montañas, diversas ruinas resistían al paso del tiempo. Con estructuras reminiscentes de la antigua arquitectura enana, de sus ancestros desaparecidos del plano terrenal hace cientos de años, estas ruinas ocultaban extrañas runas y escrituras describiendo la historia de esos asentamientos. Por otro lado, artilugios antiguos esperaban ser recuperados y rescatados del olvido, pruebas vivientes del ingenio sin paralelo de los enanos de antaño. Sin embargo, la más extraña sorpresa fue la aparición de escrituras en un lenguaje antiguo e indescifrable por sus descubridores. Tras estudios del lenguaje en la Magna Academia Argenta, se llegó a la conclusión de que pertenecía al lenguaje de los dragones, los míticos descendientes del Kruziik original, el Dragón del Tiempo Akatosh. El eventual descubrimiento de colosales ruinas en alturas aún mayores, con un diseño y magnitud distinto a cualquier cosa visualizada en Kreinvulqo, dió paso a los rumores de que la cima podría sostener un portal hacia el mítico plano de los dragones, Akathya.
Las leyendas indicaban que, como hijos predilectos de Akatosh, los dragones poseían su propio plano en el cual daban rienda suelta a su magnificencia. Con palacios del tamaño de montañas y riquezas incontables en una vida humana, las poderosas criaturas eran miradas con ambición y respeto por los mortales. Conocidos por su incomparable poder físico y mágico, su destructivo aliento y su gran inteligencia, hace milenios que no eran vista común en el continente. Por muchos siglos llegaron a ser pensados como meros mitos, los más escépticos creyendo que eran meramente fantasías e invenciones de los ancestros. Sin embargo, nunca faltaban los rumores a lo largo de Kreinvulqo de que una gigantesca figura alada sobrevolaba las montañas del mundo, claramente distinta a cualquier animal conocido.
Ahora, una carrera ha comenzado por parte de los aventureros más ambiciosos de la Alianza para ser los primeros en descubrir los secretos de los dragones. Decenas de grupos inician sus expediciones hacia la cima de la Cordillera del Cielo, esperanzados por la promesa de poderes y riquezas más allá del plano terrenal. Sin embargo, la fortaleza draconiana ha impedido el paso de cualquiera. Barrera que detiene el paso de los mortales, muchos han intentado avanzar rodeándola sin éxito. Aquellos que han entrado no han vuelto, con aquellos que decidieron volver contando historias de poderosos rugidos dentro de la casi inexpugnable fortaleza, rugidos distintos a cualquier criatura que hubiesen escuchado antes. Algunos incluso indican haber visto sobrevolar a la figura de un dragón sobre la fortaleza, rápidamente apareciendo y desapareciendo entre las ruinas y la roca. Por ahora, sólo la imaginación sirve de límite respecto a los misterios que esconde la Cordillera del Cielo, y aún hay muchos dispuestos a averiguarlos.

Tipo

Mountain Range