Nanref
(a.k.a. Guardián de los Secretos, Guía de las Almas)
Señor de los muertos y amo de los secretos. Sus heraldos guían a las almas que transitan hacia a través de la Corriente hacia el Ácira, y que aguardan su juicio en el Jamarfil. Enemigo de la muerte andante, es ausente y misterioso, dado también su papel de preservar a salvo los secretos de Kalh y de los dioses mismos.
Como señor de los muertos, enseña a respetar a quienes vivieron antes, y les insta a atesorar los conocimientos que ellos legaron; algunos de los cuales han de ser preservados por su clero para ser revelados en el momento adecuado. Enseña que la muerte es un ciclo inevitable, y que es sólo un paso más en la constate evolución de la Esencia.
Dominios divinos
Nanref ostenta el dominio de sobre la muerte entendida como parte del ciclo natural, y por extensión de los muertos y penitentes. También representa a los antepasados, los ciclos, la otra vida y los secretos. Como guardián de los secretos, extiende de manera limitada su ámbito también sobre el conocimiento.
Símbolos y marcas divinas
Los heraldos de Nanref tiene por símbolo sagrado una calavera sobre la que descansa una rosa, o una daga.
Dogmas de fe
- La muerte es inevitable, respeta el dictado del Guía
- La muerte es sólo otro cruce en el camino, ni el comienzo ni el fin.
- Oponte a quienes busquen, por artificio, prologar la vida.
- Respeta a quienes vivieron antes que ti, legaron sus secretos y murieron para hacerles lugar.
- Aprende los secretos del mundo y déjalos sobrevivirte; es tu forma de ser inmortal.
- Dentro de cada ser, descansa el secreto que lo puede destruir.
- Conoce, calla y controla lo que otros no pueden.
- El conocimiento es más fuerte que la más afilada de las espadas, atesóralo y úsalo con discreción.
- Serás amo de lo que calles, y esclavo de lo que digas.
Festividades
La Partida
Cuando un kalhes muere, los heraldos de Nanref ofician ritos funerarios que van desde lo simple hasta lo complejo según quien los requiera, si bien el esquema es el mismo y los adornos sólo son comparsa y ostentación: todos son iguales a los ojos del Guía, y todos merecen el mismo trato. El rito funerario varía de un lugar a otro, según las tradiciones locales, pero Nanref manda siempre depositar una pluma blanca sobre el cuerpo del caído, la que será puesta en la balanza ante los ojos del Guía una vez su Esencia llegue al Jamárfil; en el otro lado de la balanza irá el corazón del difunto. Si su corazón es más liviano que la pluma, será bien hallado y guiado a los salones de su dios. La Guía
Siempre que alguien muera estando presente un sacerdote de Nanref, este está obligado a realizar la Guía: un sencillo ritual donde el heraldo entona una breve letanía mientras golpea rítmicamente el suelo. Tal hecho es para abrir la Espiral al alma que se va y darle aviso al Guía de que alguien más golpeará su puerta en el Jamárfil. Una versión diferente de la Guía es realizada por varios heraldos en lugares donde los muertos sean muchos, como en un campo de batalla. Sedh'Bennam
El Sedh'Bennam es una bendición realizada por un heraldo sobre una reunión, concilio o similar. En tales ocasiones el sacerdote bendice una daga ceremonial o una rosa, objeto que es colgado en el centro del lugar donde se llevará a cabo la reunión. Desde ese momento, todo lo que se hable en ese lugar quedará sellado secretamente entre esas paredes y se dice que quien rompa el pacto será maldecido por el Guardián de los Secretos. Sólo los más altos rangos de entre los heraldos pueden otorgar un Sedh'Bennam, y cuando éste tiene lugar se dice que la reunión ha sido un Concilio bajo la rosa o Concilio a juicio de daga. La Voz del Silencio (2 Capanegra)
Una vez por año, el segundo día de Capanegra, en cada templo de Nanref tiene lugar la Voz del Silencio. En aquel ritual, los heraldos del Amo de los Secretos revelan alguno de los que guardan en sus salones, habitualmente elegido al azar. Los secretos contenidos suelen ser bastante crípticos en su mayoría, y de diversas fuentes. Aquellos que regalan sus secretos a los nanritas son conocidos como kee'onne o Adelantados, y los heraldos creen que su dios les regala visiones de los días por venir. Sea o no cierto, el año en curso es nombrado según el secreto emanado de alguno de los principales templos de Nanref.
Cuando un kalhes muere, los heraldos de Nanref ofician ritos funerarios que van desde lo simple hasta lo complejo según quien los requiera, si bien el esquema es el mismo y los adornos sólo son comparsa y ostentación: todos son iguales a los ojos del Guía, y todos merecen el mismo trato. El rito funerario varía de un lugar a otro, según las tradiciones locales, pero Nanref manda siempre depositar una pluma blanca sobre el cuerpo del caído, la que será puesta en la balanza ante los ojos del Guía una vez su Esencia llegue al Jamárfil; en el otro lado de la balanza irá el corazón del difunto. Si su corazón es más liviano que la pluma, será bien hallado y guiado a los salones de su dios. La Guía
Siempre que alguien muera estando presente un sacerdote de Nanref, este está obligado a realizar la Guía: un sencillo ritual donde el heraldo entona una breve letanía mientras golpea rítmicamente el suelo. Tal hecho es para abrir la Espiral al alma que se va y darle aviso al Guía de que alguien más golpeará su puerta en el Jamárfil. Una versión diferente de la Guía es realizada por varios heraldos en lugares donde los muertos sean muchos, como en un campo de batalla. Sedh'Bennam
El Sedh'Bennam es una bendición realizada por un heraldo sobre una reunión, concilio o similar. En tales ocasiones el sacerdote bendice una daga ceremonial o una rosa, objeto que es colgado en el centro del lugar donde se llevará a cabo la reunión. Desde ese momento, todo lo que se hable en ese lugar quedará sellado secretamente entre esas paredes y se dice que quien rompa el pacto será maldecido por el Guardián de los Secretos. Sólo los más altos rangos de entre los heraldos pueden otorgar un Sedh'Bennam, y cuando éste tiene lugar se dice que la reunión ha sido un Concilio bajo la rosa o Concilio a juicio de daga. La Voz del Silencio (2 Capanegra)
Una vez por año, el segundo día de Capanegra, en cada templo de Nanref tiene lugar la Voz del Silencio. En aquel ritual, los heraldos del Amo de los Secretos revelan alguno de los que guardan en sus salones, habitualmente elegido al azar. Los secretos contenidos suelen ser bastante crípticos en su mayoría, y de diversas fuentes. Aquellos que regalan sus secretos a los nanritas son conocidos como kee'onne o Adelantados, y los heraldos creen que su dios les regala visiones de los días por venir. Sea o no cierto, el año en curso es nombrado según el secreto emanado de alguno de los principales templos de Nanref.
Mental characteristics
Historia personal
En el Amanecer de los Dioses, durante la Segunda Edad, se cuenta que el Guardián llegó del Jamarfil para disputarle a Alina el dominio sobre la muerte. La Niña-Sol ostentaba su dominio, así como el de la vida y su ciclo, y el Guardián junto a otros dioses consideraban que tal magnitud de poder era inapropiado en el equilibrio de fuerzas. Lejos de disputarlo, Alina entregó el dominio a Nanref de buen grado y este, contrariado, tardó en asumir la significancia de tal ámbito de poder: ahora el Guardián sería también el Juez de las Almas, en su camino hacia el Ácira.
Su rol sobre la muerte lo enfrentaba sin cuartel sobre Ceremh, deidad que en su momento creció mucho en poder. Pese a todo, tal es el carácter sosegado de el Guardián, que siempre se retiraba cuando el conflicto podría escalar a mayores consecuencias. Y pese a lo que muchos se podrían esperar, Nanref no tuvo participación alguna en la caída en letargo del Señor de la Peste.
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